Exposición fotográfica de Eduardo del Conde
El arroz es un préstamo cultural junto con la caña de azúcar y otros productos que llegaron a México por las rutas comerciales de la antigua Nao de China y a Morelos por el Camino Real de Acapulco a la Ciudad de México. Es hacia el final del siglo XIX que se desarrolla una gran industria arrocera junto con la caña de azúcar con la que comparte el cultivo en sus campos en una especie de rotación de cultivo alternado.
Por su excelente calidad, el producto ganó en el año de 1900, en la Exposición Universal Internacional de París, uno de los premios más importantes: Mejor Arroz del Mundo, del que existe constancia y una Medalla al Mérito, actualmente en posesión de la familia Gómez, heredera del Sr. Alberto Gómez, productor originario de Jojutla, Morelos, quien recibió el reconocimiento.
El 13 de febrero de 2012, se otorgó la Constancia de Denominación de Origen del Arroz Morelense, por lo que ahora, como un arroz certificado y de gran calidad, permite que la producción del arroz de Morelos pueda estar mejor cuidada y con mejores controles, lo que deberá favorecer al propio producto a nivel nacional e internacional.
El arroz -junto con los lugares del cultivo, producción, infraestructura, caminos y molinos- es motivo importante para su conservación y protección como patrimonio del Estado de Morelos, ya que forma parte de un paisaje cultural como categoría cultural, lo que debe beneficiar para conservar (además del producto arroz) el entorno en el que éste se encuentra y de todo su patrimonio inmaterial relacionado de tradición y cultura.
De 22 molinos de arroz que existieron en el Estado de Morelos, solamente se conservan cuatro que son productores y comercializadores: San José en la Hacienda de la Perseverancia en Jojutla, Puente de Ixtla, Emiliano Zapata y el Buenavista de Cuautla con sus cuatro principales marcas las cuales se conocen bajo el nombre de Soberano, San José, Flor India de Morelos y Buenavista, mismos que integran las variedades de grano que en 2012 recibieron la Denominación de Origen que otorga la Secretaría de Economía, a través del Instituto Mexicano de Propiedad Industrial (IMPI). Esto crea condiciones favorables para no tener que competir con grano extranjero de mala calidad y de mala producción (a granel) al ser el arroz del Estado de Morelos producido de manera mucho más artesanal y tradicional como el secado al sol y otras características, se logra un arroz de tipo gourmet y de excelente calidad.
La exposición fotográfica de Eduardo del Conde Los hombres del arroz. Tradición y cultura, tiene como objetivo el reconocimiento a todos aquellos que intervienen en esta actividad agrícola. Asimismo, da fe y deja el testimonio de su noble labor para futuras generaciones. En palabras del autor: “Esta exposición es un homenaje a la gente del campo; a su ardua y creativa labor, conocimiento ancestral y a contagiosa alegría. Nace a partir de la experiencia personal vivida con la gente de campo, involucrada en la producción del arroz en Morelos. Con ella, pretendo mostrar que aún en las condiciones más duras de trabajo, existe una riqueza cultural importante de la que emanan formidables imágenes.”
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